• No quiere probar nuevos alimentos.
• No le gusta tocar los alimentos y llevarlos a la boca.
• Acumula alimento en la boca y tarda mucho en tragarlo o lo escupe.
• No le gusta/tolera lavarse los dientes.
• Si a los 10 meses sigue con papillas y no tolera alimentos en trozo.
• No quiere probar nuevos alimentos.
• No le gusta tocar los alimentos y llevarlos a la boca.
• Acumula alimento en la boca y tarda mucho en tragarlo o lo escupe.
• No le gusta/tolera lavarse los dientes.
• Si a los 10 meses sigue con papillas y no tolera alimentos en trozo.

• Dificultades para succionar y/o mantener la succión
• Tose o arquea al recibir el pecho o biberón.
• Tomas muy largas y/o con muchas pausas
• Rechazo al pecho o biberón constante
• Reflujo
• Llanto frecuente durante o después de las tomas.
• Dificultad para subir de peso y talla
• Evita tocar superficies con manitas o pies
• No se lleva manos y/u objetos a la boca
• Frenillo corto

• Llora al sentarlo en su silla
• Evita tocar los alimentos
• No se lleva los alimentos a la boca
• Evita ciertas texturas, temperaturas o sabores de alimentos
• Come solo ciertos grupos o tipos de alimentos
• Saca de su dieta grupos enteros, ej. ninguna fruta, ninguna proteína
• Se llena la boca con comida
• Traga la comida sin masticar
• Muestra tos, náuseas, vómitos frecuentes durante o inmediatamente después de comer
• Continúa aceptando solo papillas después de los 10 meses.
• La variedad de su dieta empieza a reducirse de manera importante
• Se llena la boca de alimento frecuentemente
• Guarda el alimento en las mejillas
• Traga la comida sin masticar
• Se rehúsa a probar alimentos nuevos
• Busca alimentos de marcas específicas, si no no los consume
• Solo consume los alimentos con preparaciones específicas
• Ante la presencia de alimentos nuevos se enoja o llora
• Su dieta consta de tan solo algunos alimentos (menos de 20) que rotan constantemente
• Muestra comportamientos negativos a la hora de la comida (por ejemplo: llora, se arquea, aparta la comida, se niega a comer, hace “berrinches” a la hora de la comida
• Alimentación y comidas excesivamente largas
• Falta de crecimiento o aumento de peso

Número de sesiones: 1 dependiendo del bebé/niño(a)

La valoración consiste en identificar las posibles causas que provocan que el niño(a) presente las dificultades en su alimentación para así poder diseñar un plan de acción que plantee objetivos específicos para las necesidades del bebé o niño(a).

Durante una sesión de valoración, la terapeuta observa la dinámica familiar, habilidades motoras, sensoriales, emocionales y sociales en un momento de comer. Esta información se complementa con la que proporcionan los padres acerca del desarrollo alimenticio de su hijo, su estado de salud, y dieta actual, entre otros factores relevantes. 

Se recomienda que la valoración se haga de manera virtual/online por los siguientes motivos:

• Para así poder observar al bebé o niño(a) en su ambiente y evitar que se ponga alerta en un lugar nuevo que no conoce y requiere adaptación.
• Analizar de manera más acertada las posibles dificultades.
• Observar el ambiente físico en el que se alimenta (sillas, utensilios, presentación de alimentos,
  posibles distractores, etc.)
• Conocer el estilo de interacción que tienen los padres/cuidadores principales cuando el niño come.

Poder platicar abiertamente con los papás sin que el niño esté presente para evitar que el niño se sienta desaprobado o señalado.

Aunque la recomendación para la valoración es realizarla online, en caso de requerir que sea presencial se solicita llevar un cuidador para el niño mientras mamá o papá responde las preguntas.

La terapia de alimentación tiene dos objetivos principales:

1. Ayudar al bebé o niño(a) a desarrollar habilidades necesarias para aprender a comer y disfrutar de los alimentos.
2. Darle herramientas teóricas y prácticas a los papás para poder favorecer el medio ambiente que influye de manera significativa en la alimentación, así como estrategias y actividades para realizar en casa y así lograr avances más significativos.

Nuestra metodología asegura que el niño:

• Tenga asociaciones positivas con los alimentos.
• Cuenten con los prerrequisitos motores.
• Desarrollen habilidades orofaciales (chupar, masticar, tragar)
• Desarrolle la tolerancia sensorial necesaria para ampliar el número de alimentos que acepta.

Para trabajar en la sesión se solicitan algunos alimentos o material.

Asesoría de alimentación complementaria

Bebés entre 5 y 11 meses de edad. | Duración: 1 sesión

• Introducción de alimentos sólidos a tu bebé y lograr de esta etapa una experiencia positiva y agradable
• Identificarás si tu bebé cuenta con los prerrequisitos necesarios para comenzar, en caso de que no te enseñamos a favorecerlos.
• Aprenderás sobre los diferentes métodos para elegir el que mejor se adapte a tu bebé (tradicional, BLW, BLISS)
• Aprenderás cuáles son las mejores herramientas (sillas, utensilios) para comenzar la alimentación complementaria
• Diseñaremos un plan de horarios y rutinas que se adapte a las necesidades de la familia.
• Asegurarás que la alimentación de tu bebé sea la adecuada en cantidad (porciones) y calidad nutricional.

Asesoría nutricional

Niños y adolescentes de 1 a 17 años | Duración: Varía en cada caso

• Sesiones personalizadas que se adaptan a las necesidades de cada niño y/o adolescente.
• Se analiza su estilo de vida, condiciones físicas, hábitos y rutinas familiares para establecer objetivos y herramientas educativas que podrán ser aplicadas dentro de la vida diaria.